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El hospital infantil Driscoll en Corpus Christi decidió el transporte de al menos 10 bebés de una unidad de cuidado intensivo neonatal al hospital infantil Cook en Fort Worth.


Asimismo las autoridades migratorias están trasladando a los inmigrantes que estaban detenidos en instalaciones que se ubican en la trayectoria por la que se pronostica pasará el huracán Harvey.


Daniel Bible, director de la oficina Operación de Ejecución y Remoción de San Antonio, indicó el jueves por la noche que los detenidos del Servicio de Control de Inmigración y Aduanas (ICE) que se encuentran el Centro de Detención de Port Isabel están siendo trasladados a otras instalaciones.


Bible dijo que no dará a conocer las ubicaciones específicas de las instalaciones a las que los detenidos están siendo enviados. Indicó que es una labor de rutina el reubicar a los detenidos durante las amenazas de huracán.


Mientras tanto el Centro Nacional de Huracanes indicó que el huracán Harvey es muy peligroso y que su trayectoria podría mantenerlo fuerte por más tiempo de lo que se pensaba, incluso hasta los primeros días de la próxima semana.


Se prevé que el meteoro genere inundaciones devastadoras debido a las intensas lluvias y el incremento en el nivel del mar, señaló el centro de huracanes.




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Según los pronósticos, Harvey tocará tierra la noche del viernes o el sábado en la madrugada. Entonces probablemente permanecerá estático cerca de la costa o apenas dentro de tierra durante el fin de semana.


Los aeropuertos de Houston prevén que continuarán con sus operaciones después de que el huracán Harvey afecte el sur de Texas, aunque las aerolíneas alentaban a clientes a cambiar sus planes de viaje.


United, Southwest y American ofrecieron no hacer cobros adicionales a los viajeros que modifiquen las fechas de sus vuelos programados de viernes a domingo sean de llegada, salida o entronque en Houston y otras ciudades de Texas. Delta hará válida esta medida hasta el sábado.


Actualmente acompañado de vientos de hasta 160 kmh, Harvey podría convertirse en las próximas horas en el huracán más potente en tocar territorio estadounidense en doce años, según el Centro Nacional de Huracanes (NHC).

Anoche el fenómeno aumentó un nivel la clasificación, ahora considerado de categoría dos en una escala de cinco.

"A todos aquellos que todavía no han abandonado (la ciudad), por favor apúrense en hacerlo", dijo Ted Wheeler, alcalde de Portland, una ciudad de la costa de Texas de 17.000 habitantes. El alcalde insistía que desde hoy viernes todo desplazamiento será más difícil y peligroso por los violentos vientos.

También se realizaban evacuaciones y preparativos en Port Aransas, mientras el alcalde de Corpus Christi, con cerca de 300.000 habitantes, exhortó a sus residentes a abandonar la urbe.